Las partes han estado negociando una compensación al Estado ecuatoriano por los daños que causaron los sobornos
La empresa pública Petroecuador presentó una demanda este miércoles contra la compañía CNO S.A., anteriormente conocida como Constructora Norberto Odebrecht S.S. por incumplimiento de contrato en la construcción del Poliducto Pascuales-Cuenca (PPC).
El trámite legal lo han iniciado su gerente general, Ricardo Merino, y el procurador general del Estado, Íñigo Salvador, ante la Corte Provincial de Justicia de la provincia de Guayas (suroeste).
En una demanda por daños y perjuicios, la compañía estatal ecuatoriana asegura verse perjudicada del incumplimiento del contrato en la construcción del PPC y demanda unos 280 millones de dólares.
«Un equipo técnico, jurídico y de peritos avalados por el Consejo de la Judicatura realizó el avalúo minucioso y pormenorizado de todos los daños y perjuicios que ha ocasionado la empresa CNO S.A. en la construcción», dice un comunicado.
Y precisa que «se identificaron problemas de estabilidad del Terminal de Cuenca, los mismos que han afectado la operación de esta instalación, al punto de reducir su funcionamiento al 50%».
También han producido inconvenientes en el funcionamiento del PPC especialmente en el tramo que va «desde la Terminal La Troncal hasta la Terminal Cuenca, todo esto causado por los incumplimientos de la contratista».
Entre los elementos jurídicos de la demanda, se mencionan que la empresa CNO S.A. no entregó la obra conforme las condiciones establecidas en el contrato de construcción ni en el tiempo pactado, y que tampoco solucionó los contingentes presentados en la construcción.
«Varias son las consecuencias gravosas ocasionadas por el incumplimiento contractual, siendo entre las más importantes el hecho de que no se haya cumplido con la finalidad del proyecto, diseñado para evitar el uso de auto-tanques que debían ser reemplazados en su totalidad por el PPC ahorrando al Estado ecuatoriano una cantidad anual importante de dinero y recursos», concluye el comunicado.
La demanda en el caso del PPC se produce en un momento de tensión entre ambas partes desde el escándalo de los sobornos de la brasileña que fue revelado a finales de 2016, y que tuvo en Ecuador varias ramificaciones de corrupción.
Las partes han estado negociando una compensación al Estado ecuatoriano por los daños que causaron los sobornos, pero la brasileña rompió el diálogo y con ello el Gobierno del país andino anunció que abriría demandas judiciales para resolver todos los contenciosos.