La Organización Internacional de Derechos Humanos (OIDH) pidió al presidente Danilo Medina disolver la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y la Dirección Central Antinarcoticos de la Policía (Dican) por los alegados niveles de corrupción en que incurren sus miembros.
Al encabezar una rueda de prensa junto a otros miembros de la OIDH, su presidente, Alberto Díaz Reyes, dijo que en sustitución de la DNCD y la Dican podrían crearse patronatos que involucren a la sociedad civil para la prevención y la parte represiva quedarse en manos del Ministerio de Defensa.
Afirma que ambas entidades en vez de enfrentar el narcotráfico que afecta al país se han hecho cómplices y fabricantes de delincuentes para que operen ese negocio. Sostuvo que esos organismos colocan drogas a jóvenes para arruinarles la vida y que no obtengan empleos y luego sus propios miembros obligarlos a vender sustancias controladas para cobrarles peaje.
Explica que el escándalo que actualmente involucra a cinco miembros de la DNCD y a una fiscal acusados de colocar drogas durante un allanamiento en Villa Vásquez, Montecristi es sólo uno de los miles de casos de ese tipo que ocurren con frecuencia.
En ese sentido sostuvo que hace años viene denunciando que a los jóvenes de los barrios se les coloca drogas y sólo en unos pocos casos se ha aplicado sanciones a los agentes que han sido acusados de ese delito.