«Bajo la dirección del presidente, el Ejército de EE.UU. ha tomado medidas defensivas decisivas para proteger al personal de EE.UU. en el extranjero matando a Qassem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní, designada por EE.UU. como una organización terrorista extranjera», reza un comunicado del Departamento de Defensa estadounidense.
El Pentágono afirma que «el ataque tenía como objetivo disuadir futuros planes de ataque iraníes», y acusa a Soleimani de «desarrollar activamente planes para atacar a los diplomáticos y miembros del servicio estadounidenses en Irak y en toda la región».
«EE.UU. continuará tomando todas las medidas necesarias para proteger a su gente y a sus intereses en cualquier parte del mundo», afirmaron desde el Departamento.
El general iraní Qassem Soleimani falleció este jueves en el ataque de misiles que tuvo lugar en la capital de Irak. Otra víctima del bombardeo fue el jefe de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) y comandante de la milicia Kataib Hezbolá (KH), Abu Mahdi al Muhandis.
Soleimani era el comandante de la Fuerza Quds, la unidad del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica responsable de las operaciones especiales fuera del territorio de Irán.