La noche del martes 30 de marzo una patrulla de agentes de la Policía Nacional pertenecientes a la dotación de Villa Altagracia emprendieron a tiros y sin preguntar a un vehículo color blanco, terminando con la vida de una joven pareja de esposos, los pastores evangélicos Joel Díaz y Elizabeth Muñoz, e hiriendo a sus dos acompañantes.
La explicación del cuerpo del orden fue que el doble homicidio ocurrió en medio de una supuesta búsqueda de varios individuos que habían robado una moto tipo pasola, y se desplazaban en un carro, color blanco y eso ocasionó la “confusión” por parte de los agentes.
Sin embargo, a casi un mes de aquella fatídica noche de martes santo, la Policía no ha dicho exactamente a quiénes perseguían y las razones de su proceder, esto a pesar de que una semana luego de ocurrido el crimen, el vocero de la institución expresó que esos detalles serian dados a “conocer pronto”.
En su expediente, el Ministerio Público señala que la patrulla policial había improvisado un retén en el kilómetro 45 de la Autopista Duarte, a los fines de controlar el flujo vehicular, lo que provocó que los vehículos que circulaban en dirección norte-sur redujeran la velocidad y al momento de notar la presencia del carro Kia blanco, a bordo del cual se encontraban las víctimas, los agentes policiales inmediatamente sorprendieron a las víctimas con una ráfaga de disparos de diferentes calibres y en diferentes direcciones, sin permitirles que se detuvieran y mucho menos hacer contacto visual con los ocupantes del vehículo.
Por el hecho guardan un año de prisión preventiva como medida de coerción los exagentes policiales Victorino Reyes Navarro, Domingo Perdomo Reyes, Norquis Rodríguez Jiménez, Ángel de Los Santos, Antony Castro Pérez y Juan Samuel Ogando Solís mientras que el caso fue declarado como complejo.
También se encuentra detenido el coronel César Maríñez Lora, quien hasta al momento de que sucedió el hecho se encontraba a cargo de la dotación policial de Villa Altagracia. El Ministerio Público ha solicitado, por igual, un año de prisión preventiva.
Los cuerpos de Joel y Elizabeth fueron enterrados uno al lado del otro en el cementerio Cristo Redentor el pasado viernes tres de abril.