La muerte de Orlando Jorge Mera se ha convertido en un streaptees de nuestra sociedad. Nos ha encuerado, desnudado en nuestras miserias y debilidades. Y ese desnudo no es solo de la violencia convertida en cultura ante la ineficiencia de un sistema de seguridad pública que cuida al que tiene dinero y castiga al que le toca el arrabal, sino en las relaciones sociales, en la precariedad del análisis y el irrespeto a la humanidad.
Como soy periodista me siento en la obligación de hablar de lo que vi ayer en la funeraria Blandino que solo refleja la pobreza en la formación de una parte de nuestros reporteros y reporteras que no creo que sean la mayoría pero fueron a quienes tocó cubrir una situación que como todo en la vida tiene características especiales que marcan una forma de actuar.
Hay una cosa que se llama duelo y el duelo hasta se estudia. Hay que revisar lo que se enseña en las escuelas de periodismo para que el periodismo mejore. Como en todas las carreras en el periodismo cada hecho marca el uso de un género especializado pero aquí el declaracionismo de fulano dijo y agregó se ha tragado todo y los jóvenes periodistas que no tienen una declaración no tiene nada con que construir una historia.
Les invito a que busquen los diarios de hoy: Abinader dijo, Leonel dijo, hasta Rafael Paz dijo. La incapacidad de describir los hechos les obliga a buscar una declaración hasta de Juaniquito el Tiznao para llegar a la redacción con algo.
Es el periodismo que titula: Fulano rompe el silencio y creo que como el titulo mueve el morbo habrá gente que se ha acostumbrado a buscar un silencio que debe estar requeté roto es más desbaratado. Nuestra sociedad se está acostumbrando al periodismo mediocre y hay una curiosidad en ese sentido. Mientras se respeta las especialidades en todas profesiones pareciera que es para todo menos para los periodistas. Médicos, ingenieros, arquitectos, abogados tienen especialidades pero los periodistas somos un montón de iguales que no sabemos cuando toca crónica y cuando toca reportaje.
Natali Faxas salvó la jornada y escribió la única crónica de lo que pasó a propósito del asesinato de Orlando Jorge Mera y Acento hizo la única cronología. Quienes lean ambos trabajos entenderán lo que pasó sin el dijo y agregó. Los y las periodistas somos quienes escribimos la historia, a quienes le interese el tema les sugiero que busquen lo que han escrito los mejore periodistas del mundo y seguró que ninguno ha estampado el famoso fulano dijo.