Edwin Antonio Pichardo, de 45 años, había llegado el viernes en la noche al país, procedente de España, a fin de pasarse unas vacaciones junto a sus familiares en el sector Cerros del Ozama, en Santo Domingo Este.
Aquella noche fue de júbilo y bienvenida ya que Edwin quería estar al lado de su madre, a quien tenía un tiempo considerable que no veía. Pero nadie hubiese imaginado que ayer la inseguridad ciudadana quebraría para siempre la paz en ese hogar.
Alrededor de las 2:00 de la tarde, él estaba en la marquesina de su casa cuando un señor al frente se disponía a estacionar su motocicleta y fue interceptado por dos individuos que se desplazan en otro motor con la finalidad de atracarlo.
Edwin, al observar esta acción, intentó evitarlo ya que según su padre, Avelino Pichardo, él estaba armado. Sin embargo, los delincuentes al parecer se dieron cuenta de sus intenciones y la emprendieron a tiros contra este, matándolo en el acto.
“Él estaba en la marquesina, trató de evitar el atraco, oyeron que sobó y a él fue que le tiraron”, dijo Pichardo.
Su hijo tenía 12 años residiendo en España y todos los años venía al país a pasar sus vacaciones. El cuerpo fue llevado al Instituto Nacional de Ciencias Forense para los estudios de rigor.
Mientras, varios miembros de la Policía Nacional se encuentran en el lugar recabando informaciones que den con el paradero de los autores del crimen.
Frederick Jiménez, hermano de crianza de Edwin, denunció que la delincuencia tiene en zozobra aquellas zonas aledañas al sector Cerros del Ozama.
“Aquí no hay patrullas policiales, no hay vigilancia de ningún tipo y viven atracando. Eso que le pasó a mi hermano, no es el único caso registrado, en los sectores María Trinidad Sánchez, Moisés y Jardines del Ozama, uno no puede vivir tranquilo por los delincuentes”, señaló Jiménez.
Delincuencia
Otro hecho
En otro hecho, el pasado viernes, la Policía Nacional informó que una patrulla de la Dirección Regional Cibao Central enfrentó a dos jóvenes cuando presuntamente intentaban realizar un asalto a un local comercial en la zona de las Colinas de Santiago.
Los individuos, quienes fallecieron por los impactos de balas, se desplazaban en una motocicleta modelo CG, color rojo, sin placa.
La entidad informó que los hombres intentaron atracar el Mini Market La Simpatía de ese sector, pero la intervención policial evitó que se consumara el hecho, de acuerdo al parte policial, uno de los antisociales portando un arma de fuego apuntó a los agentes, viéndose estos en la necesidad de responder la agresión impactando al nombrado Julio Rafael Taveras (Jumbo), residente en Los Ciruelitos, y otro sujeto apodado (El Gordo).
Se les ocupó una pistola que portaban de manera irregular y la motocicleta en la que se desplazaban.