Las visitas sorpresa que realiza cada fin de semana el presidente Danilo Medina tienen baja probabilidad de impactar significativamente en la reducción de la pobreza y la desigualdad en el país.
Así lo plantea un estudio del Centro de Investigación Económica y Social Padre José Luis Alemán, de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).
Según la investigación, eso es así debido a que el factor principal que explica esa reducción es el incremento del ingreso laboral rural. “Este ingreso está determinado principalmente por los ingresos no agrícolas que se generan en actividades fuera de la zona rural”, indica.
La publicación, titulada “Reflexiones sobre el Impacto de las Visitas Sorpresa”, de la firma del economista investigador Pedro Juan del Rosario, plantea -en segundo lugar- la imposibilidad de un aumento significativo del empleo agropecuario, tomando en cuenta que la creación neta de empleo en esa actividad resultó negativa en el período 2012-2018.
“Y, en tercer lugar, los logros señalados respecto a la autosuficiencia alimentaria no se pueden sustentar con los datos disponibles. La producción nacional aporta mucho menos del 85% del gasto en alimento de los hogares dominicanos, en una trayectoria de pérdida de importancia relativa respecto a las importaciones de alimento”, dice la investigación.
Señala que en su reciente participación en el 42 Período de Sesiones del Consejo de Gobernadores del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en Roma, el presidente Danilo Medina presentó un discurso en el que trató diferentes temas sobre las estrategias de desarrollo rural implementadas en República Dominicana.
“Particularmente enfatizó el llamado programa de las Visitas Sorpresa, iniciado en el año 2012 y desarrollado con una inversión que supera los 58,000 millones de pesos en proyectos agropecuarios y otros 40,000 millones de pesos de otras instituciones del Estado, totalizando más de 2,000 millones de dólares en 6 años”, rememora la citada investigación del Centro de Investigación Económica.
Y agrega: “Si aceptamos los datos oficiales sobre la baja de la pobreza rural, causada principalmente por el incremento de los ingresos laborales, entonces hay que preguntar: ¿hasta qué punto las visitas sorpresa impactan sobre el ingreso laboral de la población rural? La pregunta lleva a plantear algunas consideraciones sobre la ocupación rural que ayudan a entender las conexiones entre el ingreso laboral y la pobreza en la zona rural”.
De acuerdo con los datos de “Reflexiones sobre el Impacto de las Visitas Sorpresa”, los ingresos mensuales de la agropecuaria dominicana se han mantenido en la última década como los más bajos entre las ramas productivas.
Indica que para el año 2018, la agropecuaria alcanzó un ingreso mensual de 12,373 pesos, frente al promedio general de 19,458 (Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo –ENCFT-); es decir, 36% menos.
“Los datos oficiales van en el sentido contrario”
Las cifras del estudio indican que de 2008 a 2015, los ingresos no agrícolas de los trabajadores rurales (provenientes principalmente de actividades urbanas) crecieron más que los ingresos agrícolas: 89.2% y 77.7%, respectivamente. Sostiene que el bajo crecimiento general del agro está relacionado con el decrecimiento tendencial de la productividad. “Aunque el presidente Medina dijo que en los primeros años de las visitas sorpresa se han generado decenas de miles de empleos vinculados a la actividad agrícola”, los datos oficiales dicen lo contrario”, plantea.
Descarga el estudio en su formato original: REFLEXIONES SOBRE EL IMPACTO DE LAS VISITAS SORPRESA por Pedro Juan del Rosario