El exjefe de la Policía Nacional, Bernardo Santana Páez, afirmó que están dadas las condiciones para que en el país se cree una Comisión de la Verdad capaz de investigar y arrojar luz sobre casos y crímenes que han quedado impune en la sociedad dominicana.
No obstante, el experto en criminalística consideró que primero se debe crear una estructura de buenos investigadores y un real programa de protección a testigos, que garanticen seguridad a los investigadores y a los que aporten las pruebas para esclarecer los casos.
“Están dadas las condiciones para que una Comisión de la Verdad funcione, pero hay que garantizar la protección a los testigos y a los investigadores. Hay mucha gente que querrían hablar y decirlo que saben, pero no hay un sistema que los proteja y ahí está el problema”, sostuvo.
Santana Páez se expresó en esos términos al responder a una investigación de N Digital que da cuenta sobre impactantes crímenes, desapariciones y escándalos que han sacudido a la sociedad dominicana, sucesos que con el paso del tiempo se han convertido en una especie de misterios casi imposible de resolver.
El exjefe policial estima que para que la Comisión de la Verdad sea funcional, debe escogerse a personas con conocimientos en el área investigativa, con recursos y tecnología, además de contar con voluntad política y respaldo del Estado.
“Si tú tienes a un presidente que dice: mataron a una persona y yo sé quién es, pero no voy a decir nada, hasta que me muera y otro lo dirá por mí; quien se atreve a moverse; quien se atreve a investigar…nadie, por lo menos en ese tiempo”, sostuvo Santana Páez, refiriéndose, aunque no lo citó, a la famosa página en blanco del libro “Memoria de Cortesano de la Era de Trujillo”, donde el entonces presidente Joaquín Balaguer (1987) revela que una persona de su confianza la llenaría con los nombre de los responsables del asesinato del periodista Orlando Martínez, hecho ocurrido en el 1975.
FUNCIONES COMISIÓN DE LA VERDAD. El general retirado opinó que una comisión de la verdad es para investigar hechos a posteriori y ha funcionado en países como Chile, Perú, y muchos de Europa.
Puso como ejemplo que los crímenes de guerra en Núremberg, Alemania, fueron esclarecidos y se castigó a los culpables y que los investigadores y testigos fueron protegidos y no hubo consecuencia contra ellos.
Indicó que sin una estructura fuerte, como ocurre actualmente en RD, es difícil investigar y esclarecer estos hechos que ya se han convertido en históricos.
“Sólo se necesita voluntad política y una estructura fuerte que te respalde. Hay que regular el programa de testigos y darle protección y seguridad a los investigadores”, indicó.
Consideró que lo más que puede ocurrir, en las actuales condiciones, es que cuando inicia una investigación, ni se le da el debido seguimiento, por la protección política y porque el investigador y los testigos terminan perjudicados.