El regidor presidente de la Sala Capitular de Boca Chica, Frank Ozuna, declaró ayer que el audio en el que parece solicitar un soborno por 360 mil pesos se trató de una encerrona creada por el empresario ferretero y que durante esa conversación temió por su vida.
Ozuna, entrevistado por las periodistas Edith Febles y Amelia Deschamps, alegó que en la oficina en la que él se encontraba conversando con el comerciante Bolívar Taveras y durante la que trató la suma de dinero, temió por su vida.
“Le estamos explicando la causa, vimos una persona detrás de nosotros. A nosotros nos encerronaron (sic) ahí, pensé que iba a salir muerto, ahí pudo haber pasado de todo. Nosotros no sentimos impotentes. Pero realmente, el dinero lo planteó él”, dijo Ozuna.
El regidor argumentó que a sus 62 años “soy un ejemplo”, ya que este martes iba a tener un examen en la Universidad Abierta para Adultos (UAPA), para graduarse en Derecho junto a sus dos hijas mayores.
Ozuna argumentó ante las periodistas que fue al lugar invitado por el ferretero y solicitó a los organismos competentes hacer una investigación minuciosa sobre el empresario y el ayuntamiento, porque a su entender se trata de una campaña para desacreditarlo.
Cuestionado por Noticias SIN, Ozuna alega “en el audio, tal como se escucha, nunca escucha a este servidor demandarle dinero. Él dice que en la otra gestión solo pagó 130 mil por una obra de la misma naturaleza y si él tiene 15 o 20 obras de esa naturaleza, parece ser que está impuesto a evadir los impuestos. El argumento de él fue que el alcalde le exoneró la obra”, indica.
Por otro lado, el empresario Taveras dice que lo que ocurrió es que no lo aceptó.