El exprocurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, dijo temer por su vida ante una serie de amenazas públicas que ha recibido por parte de imputados en el caso Odebrecht.
En un misiva enviada al presidente de la República, Luis Abinader, el exprocurador dijo que tanto Ángel Rondón como Víctor Díaz Rúa, han dicho abiertamente, y en medios de comunicación, su intención de agredirlo y hasta asesinarlo.
“Pongo en su conocimiento la grave situación que atenta contra mi vida y la de mi familia ya que en fecha 26 de mayo de los corrientes, el ciudadano Ángel Rondón, imputado del caso Odebrecht, expresó de forma pública, clara y abierta, durante el programa Acento TV, su deseo de asesinarme, solo limitando la ejecución del acto a no tener un instinto criminal”, indicó Rodríguez.
En ese sentido, recordó que Rondón fue sometido a la justicia durante su ejercicio como procurador general en el período 2016-2020.
Además de Rondón, dijo que también es de “alta preocupación” las constantes amenazas de agresión física por parte de Víctor Díaz Rúa, exministro de Obras Públicas y también imputado del caso Odebrecht, “quien en fecha 8 de febrero del 2021, frente a numerosos periodistas, expresó su intención de agresión física en cualquier momento próximo”.
Argumentó que no se habría expresado de esta manera, si se tratara de ciudadanos sin historial criminal o delictivo.
En ese sentido, recordó que ambos imputados son del interés de Estados Unidos. En el caso de Rondó, dijo que las autoridades estadounidenses “han manifestado su interés formalmente de tenerlo” y lo colocaron dentro de un listado de criminales sancionados bajo la Ley Global Magnistky, siendo el segundo en la lista, por sus acusaciones de “escandalosos actos criminales”
Mientras que Díaz Rúa “también es de altísimo interés para los Estados Unidos de América, por los graves hechos cometidos contra el erario en el marco del caso Odebrecht y las contundentes evidencias en su contra.
“Ambos casos, señor presidente, delicados por sí mismos, aumenta su gravedad al haber sido realizado a través de medios de comunicación o directamente a periodistas en plazas públicas, convirtiéndolos en actos de amenaza de orden público, sin haber intervenido a la fecha las autoridades de forma alguna”, puntualizó Rodríguez.
Presumió que ambos imputados son personas “protegidas y preservadas” por las autoridades que “velan por su impunidad” o que incluso están dispuestos a colaborar en eventuales actos criminales.
Por otro lado, indicó que dirige la carta con la denuncia hacia el presidente, luego de que la Procuradora General actual presentó formal inhibición para tratar cualquier asunto relacionado con el expediente relativo a las personas procesadas en el caso Odebrecth.